Cuanto más digamos y más hagamos juntos, mayor será nuestra influencia sobre la justicia.
En nuestra peregrinación de justicia y paz en un mundo con VIH, la Alianza Ecuménica de Acción Mundial del Consejo Mundial de Iglesias reconoce que el VIH es una cuestión de justicia y tiene en cuenta las vulnerabilidades generales y particulares de todos los hijos de Dios.
Impulsados por el imperativo del Evangelio, celebramos la dignidad inherente y la igualdad de valor de todo ser humano. Asimismo, afirmamos el potencial y el alcance de las comunidades religiosas capacitadas para lograr cambios.
La Alianza Ecuménica de Acción Mundial del CMI considera que el VIH es una cuestión de justicia y reconoce el valor inherente de toda persona.
Para realizar la visión bíblica de abundancia de vida para todos, en la campaña “La fe en la vía rápida” nos comprometemos a capacitar, movilizar y apoyar a las comunidades religiosas con el fin de contribuir a:
Objetivo 1: El mantenimiento del VIH como foco de atención mundial
Objetivo 2: El acceso universal a la prevención, las pruebas, el tratamiento, la atención y el apoyo
Objetivo 3: La erradicación del estigma y la discriminación y el respeto de la dignidad y los derechos humanos
Objetivo 4: La eliminación de las causas profundas de la vulnerabilidad ante la transmisión del VIH