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Joint ecumenical solidarity visit to Sudan - meeting with the President

El Consejo Mundial de Iglesias encabezó una delegación que visitó Sudán entre el 18 y el 22 de abril. Presidente del Consejo Soberano, el general Abdul Fattah Al-Burhan.

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“Le informé sobre la composición y la labor del CMI, y sobre nuestra participación en misiones de paz anteriores y presentes, entre ellas en Cuba, Colombia, Palestina, y, en el pasado, en Sudán”, contó Ositelu. “Asimismo le transmití nuestra preocupación por la situación en Sudán y le expliqué que también estamos involucrados en la asistencia humanitaria”.

El Consejo Mundial de Iglesias encabezó una delegación que visitó Sudán entre el 18 y el 22 de abril. El grupo ecuménico incluyó al Consejo Mundial de Iglesias (CMI), la Conferencia de Iglesias de Toda el África, ACT Alianza, los Ministerios Globales de la Asociación de Miembros de las Conferencias Episcopales en África Oriental, la Fraternidad de Consejos Cristianos e Iglesias en los Grandes Lagos y el Cuerno de África, y Ayuda de la Iglesia Noruega (Norwegian Church Aid).  

Ositelu definió la misión en Sudán como una visita solidaria para escuchar a las autoridades y al pueblo sudanés, así como para analizar la hoja de ruta hacia la paz del presidente, y estudiar cómo el CMI podría ayudar a Sudán a lograr una paz justa.

“Informé al presidente de que hemos escuchado a los ministerios especializados e iglesias miembros de Sudán”, dijo Ositelu. “Le informé de que, a pesar de los escasos recursos disponibles, las organizaciones humanitarias están haciendo todo lo que pueden”.

Muchas personas desplazadas internamente carecen de alimentos, refugio y agua; y necesitan asistencia sanitaria.

“El presidente agradeció nuestra visita solidaria y expresó su disposición a resolver el conflicto a través del diálogo”, dijo Ositelu. “Insistió en que sea cual sea el acuerdo alcanzado, este deberá contar con la adherencia de todas las partes. Algo que, según él, no ocurrió en el pasado”.

Ositelu agradeció al presidente su comprensión y su disposición a resolver el conflicto a través del diálogo.

“Tras nuestros encuentros tanto con las comunidades cristianas como musulmanas, nos quedó muy claro que el conflicto en Sudán nada tiene que ver con la religión, sino con política, etnicidad y poder”, aseveró Ositelu.  “El ministro responsable de la seguridad nos informó de la existencia de elementos extremistas y fundamentalistas, pero que son muy pocos y que sus actos son insignificantes; que no tienen ninguna función que desempeñar en Sudán”.

El Consejo Cristiano de Sudán expresó su agradecimiento por la visita solidaria, especialmente en un momento en que algunos sudaneses huyen del país a causa de la guerra.

“Están verdaderamente agradecidos”, dijo Ositelu. “Todos fuimos invitados a orar como hermanos en la Iglesia Anglicana de Port-Sudan, el 21 de abril, donde presenté mi homilía”.

El tema del mensaje de Ositelu fue “En tiempos como estos”.

En él agradeció a Dios por hacer posible la visita solidaria. “En segundo lugar, me complace enormemente que las autoridades estén abiertas al diálogo, que es fundamental para lograr todo objetivo. Y, en este contexto, nuestro objetivo es la paz justa”, dijo.

El CMI afianza las bases para la paz en una visita de solidaridad al Sudán, Consejo Mundial de Iglesias (oikoumene.org)

El CMI insta a la oración —y a la acción—por la difícil situación de la población en Sudán (oikoumene.org)