En la declaración, se exhorta a todos los que tienen el poder de remediar la lamentable injusticia y desigualdad que la pandemia pone de manifiesto –gobiernos, organismos, dirigentes religiosos, juntas y directivos de empresas propietarias de patentes y materiales– a que ejerzan el liderazgo y actúen juntos con urgencia para garantizar una distribución amplia, rápida, equitativa y asequible de material terapéutico y vacunas en el mundo entero con el fin de superar este fracaso y subsanar este error.
“Dado que el suministro de vacunas sigue siendo insuficiente para satisfacer la necesidad mundial, y que se ha concentrado en países capaces de pagar una prima para garantizar el acceso, apoyamos las peticiones de una suspensión temporal de las patentes pertinentes y de otros derechos de propiedad intelectual con el fin de eliminar un obstáculo clave para aumentar la fabricación y el suministro, sobre todo en países actualmente marginados y excluidos de un suministro adecuado de las vacunas necesarias”, recoge la declaración. “Además, exhortamos a todas las naciones con mayores suministros de vacunas a que compartan su abundancia, especialmente con países de ingresos más bajos, y que levanten las restricciones a la exportación de productos sanitarios vinculados a la COVID-19”.
El CMI apeló asimismo al intercambio compasivo de tecnología y conocimientos técnicos que permita a los fabricantes de países duramente golpeados del hemisferio sur producir vacunas para sus poblaciones y otros. “Instamos a que se dé más apoyo y contribuciones a la plataforma de Acceso Mancomunado a la Tecnología contra la COVID-19 (C-TAP) de la OMS como instrumento clave para este fin, y al Fondo de Acceso Global para Vacunas COVID-19 (COVAX, por sus siglas en inglés) para una distribución más equitativa de los suministros de vacunas disponibles”, dice el texto. “Reconocemos que, aparte de las cuestiones del suministro y la distribución de las vacunas, otros factores han intensificado los impactos de la pandemia y aún se interponen en el camino hacia la salida de esta crisis”.
En la declaración se señala, además, que la lamentable incapacidad de algunos dirigentes para actuar de acuerdo con la evidencia científica había conducido a consecuencias devastadoras para la salud y la vida de las personas.
“Estos fracasos han costado muchas vidas preciosas, y tendrán como resultado un sufrimiento más largo y profundo”, dice la declaración. “Instamos a todos los dirigentes políticos a que tomen medidas en función de la salud y la seguridad de todos los que viven dentro de sus fronteras, y promuevan los remedios científicos y médicos que mitigarán la pandemia en sus países y contribuirán a acelerar el final de la crisis a escala mundial”.
Defensores de la vacunación del CMI (en inglés)
Recursos del CMI sobre la COVID-19