La Red Ecuménica de Defensa de las Personas Discapacitadas del Consejo Mundial de Iglesias (EDAN-CMI) florecerá y se convertirá en una fuente cada vez más abundante de educación y diálogo, según afirmaron los responsables de ese programa en una reunión que tuvo lugar en Kenia del 10 al 15 de abril.
Se acordaron varias recomendaciones para alcanzar ese objetivo. En primer lugar, la EDAN-CMI se convertirá en una fuente cada vez mayor de conocimientos en materia de teología y discapacidad mediante el establecimiento de una “biblioteca virtual” o de una colección de recursos en línea, que reunirá las publicaciones de la EDAN-CMI y otros contenidos conexos, en particular los elaborados por las iglesias sobre el culto incluyente. En segundo lugar, la EDAN-CMI buscará más asociados para poder continuar su trabajo en torno a la teología y la discapacidad, que ya no contará con la financiación de la Misión Christoffel para personas no videntes a partir del próximo año.
Los responsables de la EDAN-CMI también estuvieron de acuerdo en la necesidad de reflexionar sobre el significado de la frase “la misión desde los márgenes” en el contexto de su trabajo. Esa frase representa un nuevo paradigma para la misión y une a los cristianos y demás personas de fe en la solidaridad y la hospitalidad hacia las personas cuyas vidas están amenazadas por la pobreza, la enfermedad y la violencia.
Por último, la EDAN-CMI organizará un foro dedicado a la reflexión sobre lo que implica la “peregrinación de justicia y paz” para las personas con discapacidad.
El Secretario General del CMI, el Rev. Dr. Olav Fykse Tveit, felicitó a las 24 personas allí reunidas, afirmando que la existencia de la EDAN refleja la importancia que el CMI concede a los problemas de la discapacidad como parte de la agenda de la iglesia cristiana. “La EDAN es una vía adecuada para seguir haciendo que las iglesias y la sociedad asuman la responsabilidad de sus acciones y se les ayude a ver que las personas con discapacidad son actores indispensables en su labor y en su vida” escribió Tveit.
Los responsables de la EDAN-CMI acordaron dar prioridad a las mujeres, niños, jóvenes y ancianos con discapacidad, así como a la violencia que afecta a las personas con discapacidad y la que provoca discapacidad. Asimismo es necesario ampliar la labor en el ámbito de las mujeres con discapacidad, los refugiados con discapacidad, la cuestión de la ordenación de las personas con discapacidad y la igualdad de oportunidades en el ministerio de las personas con discapacidad ordenadas.
En junio se presentará ante el Comité Central una nueva declaración de la EDAN-CMI sobre discapacidad titulada “Un don de ser”.
La EDAN-CMI trabaja a través de una red de coordinadores regionales voluntarios que se han convertido en defensores de la discapacidad. El principal objetivo de la Red es promover la inclusión, la participación y la implicación activa de las personas con discapacidad en todos los aspectos de la vida de la iglesia y de la sociedad. Como programa independiente la EDAN-CMI ha seguido contribuyendo a la sensibilización, la reflexión teológica, la creación de capacidad y la colaboración entre las personas con discapacidad.
Red Ecuménica de Defensa de las Personas Discapacitadas del CMI