En 2025, la comunidad mundial conmemorará el 30º aniversario de la Cuarta Conferencia Mundial sobre la Mujer, con la adopción de la Declaración y Plataforma de Acción de Beijing. En ella se esbozaron doce áreas de especial preocupación —como la pobreza, la salud, la violencia contra la mujer, el ejercicio del poder y la toma de decisiones— que es necesario abordar para hacer realidad todos los derechos humanos y las libertades fundamentales de la mujer.
La Rev. Nicole Ashwood, responsable del programa del CMI “Una comunidad justa de mujeres y hombres”, y su equipo tuvieron la idea de organizar una exposición relacionada con estas doce áreas.
Seguidamente, empezaron a recopilar nombres de mujeres del CMI de todas las regiones, tanto vivas como fallecidas.
“¡Ya tenemos cuarenta nombres, y seguimos añadiendo más!”, celebró Ashwood. “A pesar de los mecanismos de la ONU y otras plataformas disponibles, nadie ha pensado en poner de relieve el trabajo de las muchas mujeres religiosas que han participado activamente en esta labor”.
La Plataforma de Beijing coincidió con el Decenio Ecuménico de Solidaridad de las Iglesias con las Mujeres del CMI, celebrado entre 1988 y 1998, período en el que se gestó el lanzamiento de la campaña “Jueves de negro” por un mundo libre de violaciones y violencia.
“Ha pasado desapercibido el hecho de que ha habido mujeres eclesiásticas comprometidas en casi cada una de estas doce áreas”, señaló Ashwood. “En las 352 iglesias miembros y en las ocho regiones del CMI hay mujeres que, de un modo u otro, han contribuido en el ámbito de la participación, los programas y las voces que se expresan dentro de estos procesos”.
Ashwood especificó que la lista de mujeres que figurará en la exposición no es en absoluto exhaustiva. “A pesar de esto, lo que esperamos conseguir es impulsar esta visión, y que las iglesias miembros formen parte de esta iniciativa y reconozcan la labor de las mujeres de sus contextos que han sido instrumentos de cambio a lo largo de los años”, dijo. “Queremos que esta exposición inspire a las iglesias miembros a preguntarse: “¿Quiénes han participado en esta conversación? ¿Quiénes han sido las personas que nos han interpelado y movilizado? ¿Quiénes son los pacificadores en nuestros contextos locales?”.
La exposición se presentará en un formato híbrido: primero se publicará en línea y, a continuación, se ofrecerá en un formato físico que se transportará a las reuniones del CMI y a otros encuentros ecuménicos, incluso tal vez a la reunión del Comité Central del CMI en Beijing en 2025. “Es posible que también se pongan a disposición una publicación y materiales exclusivamente para niños, con el objetivo de darle una mayor difusión”, dijo Ashwood.
Los primeros paneles de la exposición se publicarán en línea en noviembre, y la serie continuará hasta 2025. Ashwood espera que esta exposición llegue a muchas personas en el ámbito mundial, regional y local.
“Creo que este proyecto es un don que seguirá dando su fruto continuamente”, afirmó.